lunes, 4 de junio de 2012

El árbol de la vida




-Árboles más grandes han caído.


+Creo que no alcanzas a entender la dimensión de este árbol.


-No conozco ningún árbol que llegue hasta la luna.


+¿Y tú llegas?



-No, yo no soy un árbol; yo soy la luna. Aunque no... no soy tan simple y tan bella como la luna y acostumbro a mirar al sol de frente, no a ocultarme de él.



-Pues al final acabarás ciega.


+Bueno, así no veré cómo el mundo se destruye.


-Pero lo vivirás... 

+... no es lo mismo verlo y vivirlo, que tan solo vivirlo (leete el libro de Saramago y lo comprenderás)...


-... y de una forma aun más triste que el resto: sin ver por dónde andas.


+Bueno, siempre me gustó la tristeza, me hace escribir mejor.


-Suerte que tienes de que hasta lo malo lo ves positivo.


+Ya te he dicho que si existe lo malo, por definición, existe también lo bueno.

1 comentario:

  1. Jejejejjejeje (suponía que también empezamos a reír en mayúsculas).

    ResponderEliminar